HOMENAJE
16/07/18
La parroquia El Salvador de la ciudad de Chamical informó que entre las actividades para conmemorar el 42º martirio de los curas Carlos Murias y Gabriel Longueville, figura el traslado de los restos desde el cementerio a la cripta construida en el templo. Además, una delegación de Francia participará de las celebraciones.
“Toda la Iglesia sangra en nuestros mártires” es el lema elegido por la comunidad eclesial para honrar a los curas, porque “ellos son justicia y esperanza en medio de su pueblo”. Las actividades se iniciarán el martes 17 de julio a las 20, con una velada cultural en el Salón de los Mártires.
La “Peña de los Mártires” se realizará en el salón ubicado al lado de la parroquia El Salvador, en vísperas del 42° aniversario del asesinato de Carlos Murias y Gabriel Longueville.
También habrá exposición del “Centro de Artesanos”, incluyendo música, artesanías, danza, poesía y proyecciones audiovisuales que construirán una noche cargada de memoria y emoción en la que Chamical homenajeará a sus mártires.
Traslado de sus restos
El próximo miércoles 18 desde las 8:30, dará inicio la peregrinación desde el cementerio hasta la parroquia con las urnas que contienen los cuerpos de los curas que fueron exhumados. A las 9:30 será la bendición de la cripta de los mártires en la parroquia El Salvador. A las 10, continúa la peregrinación hacia el lugar del martirio, para celebrar la Santa Misa a las 12. A partir de las 13:30, se compartirá un almuerzo comunitario.
La cripta en la que descansarán los restos de los sacerdotes fue construida por la Municipalidad de Chamical, con personal de la Dirección de Obras Públicas, en el marco de un programa municipal que busca preservar el patrimonio religioso e histórico de la ciudad.
Para mañana llegará una delegación de jóvenes de Francia, laicos, sacerdotes a Chamical, que será recibida en la capilla del Niño Dios con una merienda. Los franceses permanecerán hasta la jornada siguiente cuando se prevé su retorno. Se trata de alrededor de 30 jóvenes franceses de la diócesis de Viviers, junto con el obispo Jean Luis Balsa de esa comunidad que arribaron a La Rioja hace varios días, con el propósito de recorrer diversos lugares de la Capital y de Chamical para conocer la cultura donde prestó servicios en vida el sacerdote Gabriel Longueville.
Beatificación
Cabe recordar que la beatificación de los mártires riojanos incluye a los sacerdotes, a monseñor Angelelli y al laico Wenceslao Pedernera, en reconocimiento por haber padecido “el martirio en odio de la fe” y por el cual fueron asesinados durante la dictadura militar.
Angelelli murió el 4 de agosto de 1976, cerca de Punta de los Llanos, La Rioja, cuando el automóvil que conducía fue víctima de un ataque en la ruta y dio un vuelco que resultó fatal.
El caso fue considerado un accidente hasta que la Justicia riojana lo caratuló como un homicidio.
El obispo venía de enterrar a los sacerdotes Longueville y Murias, asesinados por fuerzas paramilitares días antes, el 22 de julio de 1976, en Chamical; y a Pedernera, el 26 de ese mismo mes, en Sañogasta.
Condenados
Por el crimen de los sacerdotes se condenó a prisión perpetua a Angel Ricardo Pezzetta, en marzo de 2015, por el Tribunal Oral Federal de La Rioja, como autor mediato de los delitos de privación ilegítima de la libertad calificada y homicidio doble y triplemente calificado de los sacerdotes, cuyos cadáveres aparecieron junto a las vías del ferrocarril en Bajo de Luca, a pocos kilómetros de Chamical, donde ahora se levanta una gruta.
Según la causa, Murias y Longueville “fueron llevados con sus ojos vendados y maniatados hasta la ladera opuesta del terraplén a la vera de la Ruta Nacional 38, en donde fueron sometidos a disparos con armas de fuego largas y cortas de distintos calibres por varias personas”.
Por ese entonces, Pezzetta se desempeñaba como jefe de la Sección de Inteligencia de la Base Aérea de Chamical. Por el mismo hecho, se condenó a Luciano Benjamín Menéndez, al vicecomodoro Luis Fernando Estrella, quien era segundo jefe de la Base, y a Domingo Benito Vera, que era jefe y responsable de la comisaría de Chamical.
Los sacerdotes
Carlos de Dios Murias OFMConv, oriundo de San Carlos Minas, Córdoba, fue un fraile franciscano que vivió en una villa en Buenos Aires, hasta que llegó La Rioja para seguir con su misión pastoral y su compromiso con los pobres.
Gabriel Rogelio José Longeville nació en Etable, Francia, en una sencilla familia campesina y cristiana. Tras ser ordenado sacerdote llegó a Argentina en el año 1970.