Alejandra Romero, su marido y sus dos hijos menores de edad, fueron desalojados en la tarde del miércoles, de un departamento de los monoblocks ubicados sobre la calle Margarita, en el barrio Antártida III..

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Según contó, su familia es de escasos recursos y solamente se sostienen por la pensión que ella cobra por su discapacidad (padece diabetes y es insulinodependiente), y las changas que realiza su marido.

La mujer indicó que desde hace cuatro meses se encontraba viviendo en el domicilio y si bien reconoció que lo hacía ilegalmente, aseguró que nunca se pudo comunicar con el titular del departamento, de apellido Herrera, para tratar de llegar a un acuerdo con él y que el mismo ya posee propiedades en Aimogasta. Finalmente el viernes último fue notificada sobre el inminente desalojo a  través de un documento firmado por el juez Barría.

Ante dicha situación, Alejandra trató de contarle al magistrado cuál es su condición y las dificultades para conseguir un lugar donde vivir, pero no tuvo éxito y después de solo tres días hábiles, fue desalojada por la Policía sin que le hayan dado una solución, o por lo menos, brindado un poco más de tiempo para buscar un techo en donde estar con su familia.

“Pido desesperadamente una solución a las autoridades de la provincia y al ministro (de Infraestructura) Carlos Crovara. Nos dejaron en la calle y no tenemos donde ir”, manifestó Romero.

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