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María Sylvia Jiménez, primera mujer con un cargo ejecutivo en la AFA

María Sylvia Jiménez se convirtió en la primera mujer dirigente de la historia en ocupar un cargo en la Asociación del Fútbol Argentino. Viene de ser la presidenta del club San Lorenzo de Alem de Catamarca..



En un piso de la calle Viamonte 1366, sede de la AFA, se celebra la primera reunión de Comité Ejecutivo con Claudio Tapia como presidente. Tras las felicitaciones del "Chiqui", Daniel Angelici pide un aplauso y la sala, plagada de dirigentes de varias provincias y del ascenso, responde con vigor. Formalmente, asumía la primera mujer con un cargo ejecutivo en la historia de la AFA (Carolina Cristinziano también formó parte de la AFA, pero pertenecía a Junta Interventora que eligió la FIFA y no bajo un sistema democrático).

María Sylvia Jiménez nunca tuvo en mente ser la presidente del club San Lorenzo de Alem de Catamarca. Pasar de firmar contratos profesionales a estar al frente de un club le parecía demasiado. Por eso, dudó y estuvo a punto de no aceptar. Sin embargo, hubo un hecho puntual que le tocó en lo más profundo de su ser y fue cuando pusieron en duda su capacidad por ser mujer. Este machismo que ella asegura que aún perdura en el fútbol argentino fue lo que la hizo cambiar de decisión y aceptar el desafío.

"En mi provincia había personas que no querían que yo esté a cargo del club por ser mujer. Entonces ahí me animé más todavía. Los comentarios iban desde de que me vaya a lavar los platos, a qué puedo saber yo de fútbol o que si estoy donde estoy es porque algo habré hecho. Dudan de mi capacidad para ocupar el cargo y no aceptan el hecho de que una mujer esté en este lugar. Percibo que niegan la realidad y que se creen que son los dueños de la verdad. Si ya venía manejando al club y hacía muchas tareas, ¿por qué no aceptar? Todo esto lo tomé como un gran desafío para mi vida y mi carrera profesional", remarca.

Pero llegó el momento en que pensó en abandonarlo todo por lo estresante que le resultaba ser dirigente de un club y al mismo tiempo llevar a cabo su tarea diaria en el Municipio. "Sentía que no tenía vida privada, porque no paro nunca, ni siquiera los fines de semana porque hay partidos. Entonces les pedí a Dios y a la Virgen que me ayudaran a tomar la decisión correcta. A los pocos días me llamó Pablo (Toviggino) y me ofreció el cargo de la AFA. Era la señal que yo necesitaba", cuenta por primera vez.

Con apenas ocho meses como presidente del elenco que hoy forma parte del Torneo Federal A, el 29 de marzo de este año María Sylvia Jiménez se convirtió en la primera mujer dirigente de la historia en ocupar un cargo en la Asociación del Fútbol Argentino. Llegó de la mano de Pablo Toviggino, el Presidente Ejecutivo del Consejo Federal y pieza clave en la estructura del flamante presidente de la AFA, Claudio "Chiqui" Tapia.

"Estoy muy feliz y orgullosa por ser la primera dirigente en ocupar un cargo ejecutivo. Si bien reniego todos los días, pienso en positivo y esta posibilidad no me hubiera llegado nunca de no haber sido presidenta de mi club. Creo que es un reconocimiento por todo mi trabajo", destaca.

E”s una realidad de que las mujeres vamos cada vez más ocupando espacios que antes no podíamos ocupar. Eso no se puede tapar y no verlo. Árbitros, jugadoras, ahora yo en la AFA, en la política. Espero que las mujeres se animen a ser presidentas de un club o vice. Muchas saben de fútbol pero por el mismo ambiente tienen ese prejuicio de decir 'no, no puedo'. ¿Por qué solamente los hombres? ¿Por qué nosotras no?", remarca.

En una charla con Infobae, María habla de sus inicios como hincha de Atlético Tucumán, de sus miedos y los de su familia por el lugar que actualmente ocupa en el fútbol. "Mi papá y mis hermanos están muy contentos y orgullosos. A la que no le gusta es a mi madre. Tiene ese prejuicio de pensar qué hago sola entre tantos hombres porque es una mujer grande y conservadora. Le da miedo la cancha y los barras y cree que el fútbol es de hombres. Fue criada en otra época, pero yo también tengo que entender que tenga ese temor", justifica. Pero en algo su madre no se equivocó. Porque a María le tocó vivir un momento muy duro con un futbolista, a los pocos meses de haber asumido como presidente de su club, porque le había cerrado el TMS y no lo pudo inscribir: "Me levantó la mano. Fue la única mala experiencia que tuve con algún jugador. Fue un momento horrible y muy desagradable, porque además lo habían presenciado otros compañeros". Acongojada cuenta cómo se compuso y salió adelante: "Pensaba 'qué tengo que estar haciendo yo acá, renegando con estos tipos'. Se me pasaron un montón de cosas por la cabeza, pero traté de entender, de ponerme en su lugar y si bien no justificaba su reacción, al pedirme disculpas y tras irse del club, se me pasó todo".

"Todos se solidarizaron conmigo y si yo me iba dejaba un proyecto a medias. Esa no era mi intención. Siempre que empiezo algo trato de terminarlo de la mejor manera posible. Hoy pienso si hubiera dejado el club no estaría donde estoy", agrega. Y en este sentido toma la bandera de la igualdad de género y hace un reclamo: le pide a las mujeres que sigan luchando, que denuncien y no se callen frente a este flagelo que les toca sufrir a diario producto de los femicidios.

Firme en sus convicciones, y en su rol de abogada, hace un fuerte reclamo para que haya un cambio urgente en las leyes y el código penal: "Es un momento sumamente complicado para el país, con la imagen de Micaela García (la joven de 21 años abusada y asesinada en Gualeguay) presente. Es un hecho el temor de las mujeres a los hombres. No hablarlo o denunciarlo perjudica. Soy abogada y aunque no ejerzo desde el 2012, sé que hay modernizar el sistema y cambiar el código penal. Desde los jueces hasta las leyes, todo quedó muy atrás en la historia. Sobre todo en estos puntos específicos de los femicidios y de los abusadores".

¿Por qué solamente los hombres y nosotras no? Espero que crezca el mundo femenino en este ambiente tan machista

El pedido va dirigido también a la predisposición de las mujeres para con el fútbol. "¿Por qué solamente los hombres y nosotras no? Hay muchas a las que le gusta el fútbol y saben, pero por ahí el mismo ambiente las lleva a que tengan ese prejuicio de decir 'no, no puedo'. Estoy segura de que con mi llegada a la AFA habrá un antes y un después para que muchas mujeres más se animen. Para que crezca el mundo femenino en este ambiente tan machista como es el fútbol", se entusiasma.