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Las prioridades de la educación ambiental

El concepto de medio ambiente ha ido evolucionando de tal forma que se ha pasado de considerar fundamentalmente sus elementos físicos y biológicos a una concepción más amplia en la que se destacan las interacciones entre sus diferentes aspectos, poniéndose el acento en la vertiente económica y sociocultural..



Por Cristián Frers

Por lo tanto, hoy en día se identifican como ambientales no sólo los problemas clásicos relativos a contaminación, vertidos, cambio climatico, biodiversidad, deforestación…, sino también otros más ligados a cuestiones sociales, culturales, económicas..., relacionadas en definitiva con el modelo de desarrollo.

La educación ambiental es una respuesta a las crisis ambientales, ya que esta educación se trabaja para crear procesos tendientes a lograr la adquisición de conocimientos y valores y el desarrollo de actitudes que apunten a lograr el desarrollo sustentable basado en el respeto por la diversidad biológica y cultural.

La educación ambiental no debería ser solo una estrategia pedagógica más  de transmisión de conocimientos, debería proveer de elementos para modificar la percepción individual y colectiva respecto al ambiente, no ya desde una visión del ambiente solo como recurso, sino como parte indisociable e interdependiente de la vida humana.

Los actuales planes de educación formal han avanzado integrando contenidos de educación ambiental a las currículas oficiales. Si bien, desde los documentos estos conocimientos son una realidad, aún hay desafíos pendientes en su implementación, la calidad y vigencia de los materiales con los que las escuelas trabajan, la formación docente en su nuevo rol de educadores ambientales y la posibilidad de que cada escuela, desde el rol que ocupa en la sociedad, pueda vincularse mejor con el medio en el cual se encuentra inserta.

La comprensión del ambiente desde esta perspectiva supone cambios profundos en la forma de construir conocimiento, ya que implica superar la fragmentación disciplinar para poder abordar un campo de estudio necesariamente interdisciplinario como el ambiente. Además, implica una valoración ética, responsable y solidaria, al reconocer que uno es parte del ambiente, por lo tanto lo que haga uno afecta a los demás y a las otras formas de vida.

Este marco conceptual tiene un alto potencial para la sensibilización y capacitación ambiental sobre todo en el ámbito de capacitación formal, y en la medida que exista una política de educación ambiental a nivel nacional.

En Argentina, la Secretaria  de Ambiente y Desarrollo Sustentable desarrollará de manera conjunta una política pública en materia de educación ambiental que implemente programas y proyectos de formación docente, elabore recursos didácticos y aportes para diseños curriculares que incorporen la dimensión ambiental en su integralidad y complejidad; acciones que serán coordinadas con los consejos federales de Medio Ambiente (COFEMA) y el de Cultura y Educación.

El ministro Sergio Bergman, firmo un acuerdo para el desarrollo de la educación ambiental a nivel nacional con el objetivo de incorporarla al sistema educativo formal, no formal e informal. “En consonancia con el pedido del presidente Macri de unir a los argentinos, qué más y qué mejor que hacerlo a través de la educación y el cuidado del ambiente”, expresó Bergman.

La educación es la base del cambio, y se debe apostar a ello a través de diversas estrategias. Es por ello que se propone trabajar en conjunto con los principales actores del sistema educativo (ministerios, docentes y alumnos) para, entre todos construir un planeta en el cual el ser humano se desarrolle en armonía con la naturaleza.  

Cristián Frers – Técnico Superior en Gestión Ambiental y Técnico Superior en Comunicación Social (Periodista).