La conjuntivitis es una infección molesta que provoca la irritación y el enrojecimiento de los tejidos que revisten los ojos. En la mayoría de los casos, se debe a un virus o una bacteria. No obstante, la conjuntivitis primaveral es producto de una reacción alérgica..
Esta inflamación ocular crónica es más frecuente en los meses de primavera y verano debido a que la cantidad de alérgenos presentes en el aire (como el polen) normalmente aumenta en estas estaciones. También puede ser producto de una reacción alérgica a otras sustancias; entre ellas, las siguientes:
-cloro de las piscinas
-humo de cigarrillo
-ingredientes de productos cosméticos
Los casos leves de conjuntivitis pueden tratarse con compresas frías y colirio lubricante. Si se trata de casos más graves, tal vez sea necesario usar antihistamínicos o antinflamatorios.
Causas
Esta afección es producto de una reacción a un alérgeno, como el polen o la caspa animal, y el riesgo de padecerla aumenta si existen antecedentes familiares de alergias, especialmente asma, eccema y rinitis alérgica.
Asimismo, el riesgo aumenta si una persona tiene otras alergias estacionales.
Síntomas
Entre los síntomas de esta afección, se incluyen los siguientes:
-irritación y picazón en los ojos
-sensación de ardor en los ojos
-lagrimeo excesivo
-inflamación de los ojos (especialmente, del área que rodea el borde de la córnea, donde esta se une a la esclerótica o parte blanca del ojo)
-ojos de color rojo o rosado
-sensibilidad a la luz intensa
-visión borrosa
-párpados ásperos, rugosos y con mucosidad blanca (especialmente, en la parte interna de los párpados superiores)