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Pequeño reconocimiento a un gran amigo

La Provincia de La Rioja será protagonista como todo los años de la Feria del Libro en las primeras semanas de agosto. Este marco cultural me permite reflexionar acerca de grandes pensadores y escritores que en sus diferentes géneros literarios trascendieron los límites de las montañas y el árido de los llanos..



Por Antonio Díaz

El lema de la Feria en esta ocasión es “Cultura de la Patria Grande”,  lo que apunta a una mirada profunda y eminente de La Rioja–Argentina y Latinoamérica como centro de producciones culturales.-

Esto no hace otra cosa mas que confirmar los puntos en común (encuentros y desencuentros) que tenemos con los hermanos del continente americano y la necesidad de analizar la historia, los héroes, los errores, los personajes, las etnias, en un contexto mayor con una mirada mas abarcativa y federal para los “olvidados de las grandes metrópolis o del interior del país”.-

La geografía y la pobreza no fueron determinantes para frenar a estos guerreros que tienen como espadas las letras, y desmoronar los sueños de la construcción de la  Patria Grande. Si revisamos nuestra historia encontramos hombres y mujeres que apostaron, y hasta perdieron su vida, por transformar una realidad diferente que albergue a todos los habitantes y permita desarrollar sus capacidades.-

El escritor es un escultor de la palabra plasmada en el papel. Se encuentra en una posición de dilucidar conocimientos, realidades, a partir de sus investigaciones, reflexiones, creaciones, elucubraciones para sí y darlas a conocer a terceros. El acto de escribir es silencioso, solitario y para muchos liberador; también es un acto generoso de dar a conocer la perspectiva del mundo dese un punto de vista particular a otros sujetos. Escribir implica arriesgarse, exponerse a la opinión de “otros” que de acuerdo a su visión de las cosas y de los hechos, juzgará como válidos, ciertos, fidedignos, importantes o insulsos lo traducido por quien empuña la pluma.-

Esta pequeña introducción es el pretexto para reconocer públicamente al Dr. HUGO ORLANDO QUEVEDO, que es un prolífero historiador, investigador, docente y uno de los cultores de las letras en la provincia.-

Nació en la Ciudad Capital de La Rioja el 26 de Noviembre del año 1937, en el desaparecido Hospital San Vicente y bautizado en el Departamento de Los Sauces.-

Su pasión por la lectura le fue transmitida por su madre Doña Martiniana Quevedo y su madrina Clara Navarro Quevedo, quien era maestra rural en las localidades de Pinchas, Los Sauces, Aminga, llegando a ser Directora de la Escuela Domingo Faustino Sarmiento; guardando en su memoria de esa época, en la que absorbía los conocimientos como niño inquieto por el saber, son los libros, que celosamente guardaban en la biblioteca familiar, de las editoriales THOR y ESPAZA CALPE ARGENTINA. En 1.968 egresa con el título de Procurador de la Universidad Nacional de Córdoba  y en 1.987 con el de Abogado de la Universidad Nacional de Tucumán. Antes de obtener su primer título de grado, y en el intervalo hasta alcanzar el segundo, tuvo una destacada participación en el Instituto de Previsión, Seguridad y Asistencia Social (I.P.S.A.S.)  ocupando diferentes cargos en ese organismo y representando a la provincia a nivel regional y nacional. Esta situación, de trabajar con cargos de gestión, fue determinante en la demora de obtener su título de abogado y en tono jocoso señala “ no fui un estudiante aventajado sino avejentado”.

Cuenta con 33 libros publicados y más de 600 artículos escritos en diarios locales. Fue corresponsal de la revista Esquiu-Suplemento Cuyo entre 1.972–1.974 y colaborador de las revistas católicas “Emanuel” y “San Pablo”. Tiene 2 libros inéditos que serán puestos a consideración del público en un futuro mediato. Fue galardonado con el premio Famatina de Plata por su labor como Investigador-Historiador, por el Consejo Deliberante de la Ciudad Capital de La Rioja en el año 2.000. La misma institución lo nombra Ciudadano Ilustre mediante Ordenanza 3326 y Decreto 245 en el año 2.004. Su militancia y trayectoria partidaria fue distinguida en el año 2.009 por el Partido Justicialista. En el año 2.000 fue Presidente de la Comisión Diocesana de Historia Eclesiástica Obispado de La Rioja y desde el año 2.009 integra la Comisión de Historia y Cultura Eclesiástica de la Provincia. Ocupó el cargo de Vicepresidente y Presidente de la Sociedad Argentina de Escritores Filial La Rioja. Recibió la Mención de Honor otorgada por la Central de Buenos Aires de la Sociedad Argentina de Escritores por su obra referida al Partido Radical en la Provincia (3 Tomos). Faja de Honor por el libro “Abel Bazán y Bustos un Obispo de Hoy”. El Gobierno de Cochabamba República de Bolivia le otorga su reconocimiento y gratitud por sus escritos en el año 2.007. En el año 2.006 el Foro Mujeres Ciudadanas de La Rioja  reconoce su labor desarrollada en pos de la reconstrucción del pasado histórico de la Provincia. Fue integrante del Directorio de la Agencia de Cultura   durante la gestión de la actual Senadora Hilda Aguirre de Soria. A ello se le suma la actividad docente en el Instituto Privado Pío XII; en la Escuela Normal Pedro Ignacio de Castro Barros y en las Escuelas Nacionales de Comercio Nº 1 y 2 entre los años 1.972 y 1.976 respectivamente, enseñando Introducción Cívica y Derecho, Estudios de la realidad Social Argentina, Educación Democrática. En esta apretadísima síntesis no quiero dejar de mencionar su lado generoso al donar a la Dirección General de Cultura en el año 2.000 fotos murales de la Iglesia de Los Molinos y al Museo de Arte Sacro una imagen de la Virgen del Rosario del año 1.870 y una de San Nicolás con su respectiva urna de 1.930, junto al reclinatorio de madera y esterilla de 1.940. Además de ejemplares del libro “Hay que Seguir Andando” referido al Obispo Monseñor Enrique Angelelli y diferentes ejemplares de libros a instituciones de bien público.

Desde niño le gustó la música y el canto, recuerda con nostalgia que a los 6 años aprendió tocar la armónica por influencia de su amigo Harry Córdoba. Las películas de western  lo remontan al viejo Cine Monumental, como premio por asistir a la escuela, colaborar en las actividades del hogar, cultivar el espíritu en las clases de “la doctrina”  (catequesis) y participar de las misas los domingo en la Iglesia San Francisco. En 1.984 llega a la Provincia de La Rioja la corriente de los carismáticos como una filosofía dentro del catolicismo que alaba a Dios con cánticos alegres al son de las guitarras y de las manos. Ahí puede expresar sus conocimientos adquiridos en las lecciones de piano en la casa de la profesora Josefina Carmona Valentini en 1.951, que vivía cerca del actual Colegio Sagrado Corazón de Jesús.

Ray Conniff siempre le pareció un artista exquisito quien despertó aun mas su amor a la música y al canto, lo que pudo sintetizar aprendiendo a tocar la guitarra y con los años ser una voz mas en el Coro Kuntur.

En el año 2.003 el Instituto Privado de Educción José Manuel Estrada, de la Localidad de Los Robles, asigna el nombre de Hugo Orlando Quevedo a la Biblioteca de la Institución.

Hoy a sus 70 y tantos años sigue escribiendo y evoca las palabras del poeta catalán Antonio Machado “….Todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar, pasar haciendo caminos, caminos sobre la mar…..”