Así se refirió el secretario de DDHH, Délfor Brizuela, ante la sanción, en la Cámara de Diputados de la Nación, de la modificación a la ley 26.736, que declaraba de Interés público, la fabricación, comercialización y distribución de pasta celulosa y de papel para diarios.

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Al concretarse, lamentablemente, estas modificaciones, lo que fué una conquista, que permitió garantizar la existencia de diarios cooperativos, vecinales, de comunidades medianas y pequeñas o de PYMES quedarían dependiendo, con total indefensión, de la voracidad cruel del mercado, que favorece la concentración monopólica y allana el camino dramático de la agonía y desaparición de medios gráficos, que generan trabajo local y,  aportan a la democratización de la comunicación y la información, baluartes de una sociedad diversa y plural, que fortalezca la libertad y el efectivo acceso a derechos fundamentales.

Junto con la denuncia de ésta agresión, que legaliza la posición dominante en el mercado de los grandes medios gráficos, accionistas principales de Papel Prensa, vaya mi decidida solidaridad con los medios gráficos afectados, en particular, nuestro querido Diario El Independiente, y el pedido, a todos los sectores políticos y sociales, a poner una barrera democrática, a ésta avanzada totalitaria y monopólica, que busca disciplinar la sociedad en el pensamiento y la opinión única, con sus consecuencias trágicas para la democracia, finalizó.

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