Los asentamientos el Mirador III y el 52 Viviendas fueron afectados por el temporal que se vivió anteayer en la Capital riojana. Allí, los ranchos fueron colapsados por el agua y en algunos casos los techos se volaron por el viento, dejando a las familias viviendo a la intemperie.

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Durante la jornada del domingo último las familias se vieron afectadas por el temporal, muchas de ellas debieron acudir a la ayuda de los vecinos que se encontraban en una mejor situación para dejar a sus hijos y protegerlos del agua. Es que el agua y el viento no sólo se llevó techos sino que dejó al descubierto un problema social de hace tiempo, en donde la gente vive con grandes necesidades y prácticamente a la intemperie. La asistencia llega pero con lo justo y lo necesario, con la promesa de volver.

Tras un recorrido por el asentamiento del barrio Mirador III, los vecinos se encontraban en las puertas de sus hogares secando al sol algunos colchones mojados, mientras que otros intentaban restaurar los techos con más nailon. Cabe destacar, que, durante el temporal, los equipos de Desarrollo Social y Defensa civil se acercaron a los barrios para entregar colchones y plásticos (nailon) con el propósito de ayudar a paliar la situación que estaban viviendo algunas familias.

Macarena Paz, del barrio El Mirador, en diálogo con El Independiente señaló que vinieron a ayudarnos personal de Defensa Civil y de Desarrollo Social, nos entregaron un nailon a cada vecino y nos dijeron que no tenían más recursos para ayudar, en mi caso se me mojaron los colchones y me prestaron algunos familiares para que pueda dormir con mis hijos”.

“Tengo un bebé de un año y otro de cinco años, hoy vino mi cuñado y una hermana a ayudarme, tenían miedo porque tengo una pieza con block puestos sin cemento, están apilados pero no están seguros y por el viento se nos podría caer encima”.

“Necesito colchones y frazadas, yo trabajo, tengo una beca laboral y con eso voy comprando de a poco mis cosas, no tengo baño, me presta una vecina del otro costado, tampoco tengo cocina, hago todo a leña y fuego”, agregó la damnificada.

Por otro lado, Erika Flores, otra vecina del mismo barrio, comentó que “ayer se vivió un desastre, se nos pasó todo, el agua mojó colchones. Tengo dos hijos, se me mojó hasta la ropa de los niños”.

“Me trajeron un solo nailon, estoy sin trabajo y necesito más plástico para el techo, porque el que tengo no va aguantar otra lluvia”, explicó la mujer.

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