En un hecho histórico, la joven Ana Paula Brizuela se consagró reina del evento que tuvo lugar en Buenos Aires, el cual la llevará a representar a nuestro país en el máximo concurso de belleza, de Miss Mundo.

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Ana Paula Brizuela tiene 23 años y es Licenciada en Administración de Empresas, recibida en la Universidad Nacional de La Rioja. En diálogo con El Independiente, la joven relató las vivencias de compartió en el encuentro de belleza que la llevó a consagrarse “Miss Argentina”.

“La verdad que yo jamás desfilé, ni participé de ningún certamen de belleza, por lo que todo esto es muy nuevo para mí y muy diferente también. A medida que iba pasando las rondas de selección me fueron preparando y en eso se encargó Eduardo Romero, que es director de Mannequen’s Models, él me explicó cómo debíamos pararnos, caminar, la postura en sí”, comenzó contando la profesional.

Además indicó que “mi mamá y mi familia siempre me decían que me presente en algún certamen, me lo decían por mi altura, pero la verdad que mi carácter es muy distinto, soy muy reservada, bastante tímida y la verdad que no me animaba. Además tenía que estudiar. Me recibí el año pasado, entonces este año tenía un poco más de tiempo, por lo que una amiga me invitó a que vayamos a participar de este certamen y quedé seleccionada”.

Ana Paula es  hija de Analía Maza y Sergio Brizuela, tiene tres hermanos, uno por parte de madre y dos por parte de padre.  Vive en el barrio de La Quebrada. Realizó sus estudios primarios y secundarios en el Colegio Parroquial Pío XII. Es dueña de una dulce voz y una sonrisa interminable que refleja la sencillez y la timidez sobre su imagen.

“Durante las diversas instancias, la familia siempre estuvo presente, primero gané ‘Miss Capital’, a la siguiente semana ‘Miss Rioja’ y el 25 de octubre ‘Miss Argentina’. Tengo el apoyo de toda mi familia, mi papá al principio no estaba seguro por la exposición que esto genera, pero me apoyó siempre y están todos felices de este logro y eso me pone muy contenta”.

Además sostuvo que “nunca me imaginé llegar a ser Miss Argentina, cuando empecé a ver a las demás chicas vi que eran hermosas y muy preparadas, algunas eran modelos, otras ya venían de participar de otros certámenes y yo no tenía experiencia en eso, por ahí pensaba que era un poco más difícil. De todos modos mi objetivo no era ir a ganar sino que fui a mostrar lo que soy, a representar a mi Rioja y a hacer lo que mejor pueda, jamás busqué compararme porque creo que eso te tira abajo, traté de ser yo misma en cualquier lugar y espacio”, agregó la participante.

Un gran cambio

“A medida que fui siendo elegida, todo fue cambiando, jamás me imaginé llegar a ser Miss Argentina y representar al país ante Latinoamérica. Luego de ser coronada, me han invitado a diferentes festivales, aún se está hablando con los organizadores de cada evento, por lo que estoy esperando la guía de todas las actividades en las que debo participar. Voy a estar en el Miss Atlántico Internacional que se realiza en Uruguay”, dijo orgullosa la joven.

A medida que Ana Paula hablaba de su presente, también comentó cómo fue su infancia. “Tuve una infancia muy feliz y en algún punto todas fuimos influenciadas por tener entre los juguetes cosas de bellezas, pinturas, muñecas barbies. Pero la verdad es que jamás me vi participando en este tipo de evento, porque siempre fui muy tímida”.

Asimismo dijo que “mi mamá era la que más quería que participe en esto. Vengo de una familia que tiene mucha historia política (es sobrina del ex gobernador Angel Eduardo Maza y de la ex senadora Ada Maza), y sentí mucho apoyo de toda la familia. Al principio le dije a mamá que no cuente a nadie hasta que no esté segura y bueno…ella no aguantó y le contó a mis tías y ellas fueron a acompañarme, a darme consejos, al igual que mis primos y eso me ayudó mucho”.

“Para mí lograr este lugar es un orgullo y fue un honor representar a La Rioja, no sólo por mí sino porque represento a la mujer riojana y me alegró mucho haber podido hacerlo, era mi anhelo dejar a mi provincia bien parada ante el país”, añadió Brizuela.

Al ser consultada por la imagen de la mujer expuesta en estos certámenes, la joven manifestó que “veo una gran evolución y creo que muchas cuestiones van a ir cambiando en este tipo de eventos, porque no sólo analizan la belleza externa sino que además ven cómo te comportás con tus compañeras, si tenés título profesional, cómo te desenvolvés ante el público, tienen en cuenta si realizás obras solidarias, si te gusta leer, hubo un señor que cenó con nosotras y en realidad era parte del jurado y nosotras no lo sabíamos. Por eso digo que este tipo de encuentros han ido cambiando mucho”.

“Para mí la belleza está en el ojo de quien la mira y es totalmente subjetivo. Lo que para mí es hermoso para otro no lo es, es por eso que se tomaron otras características para medir esa belleza. Si una persona es simpática eso demuestra otra parte de esa belleza, porque te hace sentir bien y es parte de esa vélela interna”, aseguró la joven.

Los minutos previos a la selección

A medida que Ana Paula fue recordando la experiencia, no dejó de mencionar que “estuvimos en el Victoria Palace en Buenos Aires, un salón hermoso. Sentíamos nervios pero en mi caso estaba predispuesta a aprender, como mi objetivo no era ganar me aferré a eso, a adquirir conocimientos y que esto me sirviera de experiencia”.

Del mismo modo, describió que “en los tres certámenes hubo tres pasadas, en el Nacional hubo trajes típicos en donde llevé un vestido que representaba la Chaya, que fue elaborado por Fredy Mercado y Micaela Bernedo me lo prestó. Carina Flores me ayudó también con ese atuendo. En esa pasada tenía que presentarme, explicar de dónde venía y qué representaba ese traje, todo eso fue con un baile de apertura, con banderas. Luego siguió la pasada en traje de baño y al final el vestido de gala, toda la ropa que llevé es de acá, de La Rioja”.

Ante la consulta de qué cree que le gustó al jurado de Ana Paula, la joven no dudó en responder que “para mí creo que tuvieron muy en cuenta que yo sea ya profesional, que haya terminado mis estudios. El resto de las jóvenes eran más chicas que yo, por lo que creo que eso influyó mucho”.

“Cuando sentí mi nombre como ganadora, no lo podía creer. Fui acompañada por mi familia, por Carina Pérez de la Municipalidad de La Rioja, estuve muy acompañada y eso me dio muchas fuerzas, fue muy positivo sentir esa compañía”, sumó la representante.

Con miradas hacia el futuro

Ana Paula no sólo eligió la Universidad Nacional de La Rioja para recibirse de licenciada en Administración de Empresas, sino que también decidió continuar estudiando para ser contadora público, carrera de la cual le faltan 10 materias para recibirse. Del mismo modo, la profesional señaló que “tengo un emprendimiento de alquiler de departamentos y estoy administrando eso. La verdad que todo esto me produjo un cambio, por lo que este año veré todas las propuestas que vayan surgiendo y voy a ir viendo qué es lo mejor para mí”.

Al finalizar hizo extensivo un mensaje a todas las jóvenes riojanas y señaló que “me gustaría decirle a aquellas jóvenes que les gustaría participar de este tipo de eventos, que sean ellas mismas, que si no se sienten preparadas para algo, que quizás sea bueno esperar un poco más para alcanzar esa seguridad que se debe tener a la hora de tomar una decisión, que no dejen de soñar y de tratar de cumplir esos sueños, deben tratar de enfrentar los miedos e inseguridades y, principalmente, deben aceptar lo que somos”.

“Soy muy creyente, fui catequista. En mis tiempos libres me gusta hacer actividad física, me cuido en las comidas porque me gusta sentirme bien y sana. También voy a un voluntariado que  es apolítico y religioso Rotaract Club La Rioja”, concluyó la joven.

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