Diario El Independiente || Edición Digital
Skip to main content

Artista riojana realizó descargo en las redes tras un altercado en el ingreso de un boliche

Natalia Barrionuevo publicó en la tarde de este domingo en su cuenta de Facebook un descargo público, sobre el hecho que se dio a conocer a través de un informe de Comisaría Cuarta en el que informaron que la cantante intentó ingresar a un boliche sin pagar entrada. La artista asegura en la red social que fue agredida violentamente por dos agentes policiales.



 “Vivimos en un país donde los que nos tienen que cuidar, nos maltratan. Me tocó a mí”, comienza el relato de su publicación. En él, relata que dos mujeres uniformadas la golpearon cuando ella estaba esposada.

“Perdí la entrada para pasar a un boliche, supuse que con la pulsera vip era suficiente. Una señora de muy mal genio que estaba en la puerta impedía mi ingreso, yo intentaba explicarle que la perdí, que no la creí necesaria”, comenzó a contar la cantante y, posteriormente, comentó que, luego de intentar explicarle al personal de seguridad lo que había ocurrido, dos policías “se arrimaron y fueron directo al maltrato”, según indicó, y añadió “Si me hablás mal, te hablo de la misma forma”.

Seguidamente, Barrionuevo señaló que le doblaron los brazos, la esposaron y la ingresaron al patrullero, acotando que las mismas le habrían dicho que le “iban a enseñar a respetar”, sin identificarse, a pesar de habérselos pedido.

“Se reían a carcajadas, diciéndome que ellas me iban a educar. Una de ellas, la rubia, me pegó una piña en la pera, luego otra en la cara. Todo esto pasó ante la mirada del jefe (Luís Nieto), que no hacía ni decía nada, dándoles vía libre a su diversión del momento”, expresó Natalia.

Asimismo, continuó el relato manifestando que fue llevada “descalza” a la Comisaría de la Mujer. “Me decían que iban a hacerme un control de alcoholemia y que esa iba a ser la causa (de detención). Pero no tuvieron en cuenta el detalle de que yo andaba a pie. Me acusaron de querer colarme al boliche, cuando la pulsera estaba en mi brazo”.

Por último, Barrionuevo recordó lo ocurrido en febrero pasado, cuando casi se suspende la chaya que organiza todos los años, por un problema con el permiso para el evento. “Presentía y siempre estuve segura de que después de lo que pasó con mi chaya, que no quise pagar los 130 adicionales, esto en algún momento iba a pasar. Pasó y dejó moretones en mi cara y brazos, que el médico de la policía no vio”.