Siempre es conveniente meditar en la vida y muerte de Jesús, siempre es un estímulo
En el marco de la celebración de Semana Santa, El Independiente dialogó con el Vicario General de la Catedral, Padre Roberto Queirolo acerca de cómo vivir la Semana Santa, sobre el santuario Señor de la Peña, como una manifestación de fe y también de la comercialización, que se vive en el lugar.
Queirolo comienza la entrevista explicando el significado del Jueves Santo, señalando que es “llamado así porque la institución de la Eucaristía del sacerdocio y del lavatorio de los pies y, con ese gesto de servicio que Jesús realiza con sus apóstoles diciéndole lo que debían hacer ellos, servidores de todo, El lo expresa con ese gesto y también con palabras ‘Si yo que Soy Maestro y Señor eh lavado los pies, también ustedes deben lavarse los pies unos a otros’, que lo característico del cristiano y dicho los apóstoles que son los sucesores de su obra, a los cuales después suceden a su vez los obispos, así que ser sacerdote, ser obispo quiere decir ser servidor”.
Continuando con el relato bíblico, Queirolo indica que “esa misma noche se retira para orar en el huerto y es allí donde Jesús es aprehendido, lo van a buscar afuera aprovechando la noche, evitando a la población que presumiblemente iban a defender a Jesús y lo llevan a las autoridades judías también. Ya entonces comienza su agonía esa noche, primero en el huerto donde suda sangre y después cuando lo llevan y lo flagelan, se burlan, lo escupen le colocan la corona de espinas. Empieza su tortura, los azotes, después lo hacen cargar su cruz que eran de las muertes posibles que eran la horca, apedreado que era la reservada para los más infames los considerados los delincuentes mayores. Allí (Jesús) ofrece su vida al Padre perdona al ‘buen ladrón’, así llamado comúnmente, se despide de su madre encomendándosela a San Juan y ahí en el apóstol preferido estamos representados todos nosotros, o sea, todos los creyentes, tal como El lo había anunciado y como estaba ya profetizado desde Antiguo, al tercer día resucita”.
Resurrección
En ésta ocasión el Padre Queirolo explica el conteo referido a los tres días el cual se produce la resurrección y admite “Uno nota cuando dicen ‘cómo del viernes al mediodía al domingo no son tres días’, no son tres días de la manera de computar el tiempo, ahora nosotros, pero para los judíos el día terminaba con la puesta del sol, o sea, estuvo el viernes hasta la tarde, hasta la tarde del sábado el segundo día, y ahí automáticamente empezaba el tercer día, es decir, el domingo empezaba cuando terminaba el sábado, con las puestas del sol de manera que si estuvo los tres días según la manera que tenían en su pueblo y, al tercer día resucita y se aparece a María Magdalena, a su madre, en primer lugar y después a los apóstoles reunidos en el cenáculo justamente por miedo a los judíos”.
Reflexionar en la Semana Mayor
“Siempre nos conviene meditar en la vida de Jesús y particularmente en su muerte siempre es un estímulo, sabiendo lo que nosotros costamos al Hijo de Dios, que El hubiera podido redimirnos de otra manera sin necesidad de encarnarse, hacerse uno de nosotros y sin necesidad de pasar la pasión y la muerte, pero de esa forma nos da a conocer lo que significa de grave, toda ofensa hecha a Dios, de apartarnos de ese proyecto de amor que el Padre había ingeniado para todos sus hijos, le hemos dado la espalda para seguir nuestro proyecto de vida apartándonos de El y esa ofensa, esa aberración hecha por sus hijos a su Padre, fue el castigo que Jesús padeció por nosotros”, agrega.
El santuario Señor de la Peña
Ubicado en el departamento Arauco que convoca a fieles de todo el país, el religioso hizo referencia expresando “ese rostro de Cristo, ése rostro humano que los cristianos lo denominamos como ‘el rostro de Jesús’ porque realmente parece una talla perfecta de una obra de arte de un artista célebre, bueno el artista fue Dios”, enfatizó Queirolo.
Asimismo, precisó que “antiguamente antes de la llegada de la colonización de los españoles de la fe cristiana, ya era venerado por los habitantes del lugar, por los aborígenes y como una especie de divinidad caída del cielo, porque esa piedra sola, en el medio del llano ha venido de la altura se ha desprendido de las colinas lindantes así que bueno, fue transformado en ese Dios pagano, en el Dios Cristiano, en Jesús, que ha querido como convocar allí a través de esa imagen esculpida por la Mano de Dios a los creyentes, que especialmente en Semana Santa desde una antiquísima tradición vienen reuniéndose los lugareños y de toda la provincia y también peregrinos de todo el país, sobre todo por aquellos que han tenido que dejar La Rioja y vuelven para Semana Santa y se hacen una obligación de honor de visitar al Señor de la Peña” manifestó el sacerdote.
Fe y negocios
En el mismo sentido y haciendo alusión a la cantidad de negocios en diferentes rubros que abundan en el paraje, el religioso admite “todo lo que sea negocio, Gracias a Dios poco a poco a través de los años, se ha ido corrigiendo algo, y sobre todo los últimos años se ha conseguido por lo que siempre luchamos, de que sea fuera del recinto de la Peña”.
Con respecto al pago de impuestos de los comerciantes se refirió “lo que hace la Municipalidad (Arauco) con los comerciantes es asunto de ellos, la autoridad religiosa no tienen nada que ver, y lo que se cobra como estacionamiento es un aporte, porque lleva muchos gastos, sino no hubiera habido los progresos que hay”.
A través del tiempo y en sus comienzos de sacerdocio, sostiene “recuerdo en mis tiempos se había conseguido un motorcito de luz que daba iluminación en algún lugar” agregando que actualmente “las edificaciones que se han podido hacer, las rejas para resguardar el lugar de La Peña, el santuario para que la gente tenga una mínima comodidad, adonde se han hecho esos bancos, a veces hemos tenido días de lluvias y otros días de calores agobiantes hacían falta los servicios; los pozos negros no se ven pero existen, todo eso supone trabajo y obra, todo para mejorar al peregrino que le permita participar”.
En tanto, Queirolo señaló que “es curiosos porque se paga peaje para cualquier evento deportivo, profano, bailes y demás pero cuando es un evento religioso parece que tuviera que ser gratis cuando los progresos son evidentes y están a la luz de todos y aparece como si fuera un negocio, cuando todo lo que se recoge se invierte allí, si no es para sacar plata con otro fin, es para que esos mismos peregrinos de año en año tengan una acogida más deseable dentro de la precariedad que significa todo eso” enfatizó Queirolo.
Mensaje a peregrinos
En especial está dirigido a aquellos peregrinos y promesantes que se dirigen a pie, caballo y bicicleta “que sea todo motivado realmente por la fe, es cierto que hay algo de folklórico de compañerismo, de aventura, hay algunos que van en bicicleta, a caballo, por ahí se retiran una vez que llegaron como quien va a un santuario y toma gracias y se vuelve, está bien, pero es mejor cuando se quedan y participan de las celebraciones de Semana Santa, tanto el jueves como el viernes, que la convocatoria tiene razón sobre todo se vivencia de esa forma escuchando la Palabra de Dios pudiendo participar de los sacramentos de la confesión horas y horas de confesionario por varios sacerdotes y las celebraciones que hay los tres días santos”.
Para culminar, Queirolo expresó “así que es una invitación para que todos realmente unidos a Jesús en su Pasión y en su Resurrección podamos reforzar nuestro compromiso cristiano”.