"Me senté a esperar en una silla. De golpe siento que viene un chico a mucha velocidad y me saca el celular de la mano, casi lastimándome un dedo porque lo tenía agarrado fuerte", contó en La Nación.
Luego agregó: "Siempre tengo el gas pimienta en la mano, pero este chico vino de atrás y no lo vi. Salí corriendo pero estaban en dos motos y no pude alcanzarlos".
La conductora acotó que no recibió ayuda de nadie, ni siquiera de los chicos que estaban lavando su auto y que es la segunda vez que sufre un robo de este tipo.
"Me da miedo salir a la calle, no quiero caminar. No se puede andar más, imaginate si te manotean el bolso con los documentos, me muero. Lo peor es la desprotección, porque no podés hacer nada. Vas a la policía y te van a decir que roban miles por día, lo anulás al teléfono pero seguís sin tenerlo... La impotencia es grande", reflexionó, al tiempo que dijo que hoy, por la devaluación, un teléfono como el que le robaron cuesta 100 mil pesos.
"Yo estoy terminando de pagarlo, se lo compré a Diego Ramos y mañana le tengo que llevar la plata, era nuevo. Pobre Diego, debe estar pensando que no le voy a pagar", detalló, casi como anécdótico.
Fuente: Rating Cero