La pareja de Germán Arce asegura que él está dispuesto a pagar por lo que hizo
Se llevó a cabo la segunda audiencia en el marco del juicio por la causa en contra de David Germán Arce, acusado de asesinar a Federico Cáceres en 2017. En la oportunidad, declararon varios testigos, entre ellos la pareja del imputado, quien aseguró que el mismo siente culpa y está dispuesto a pagar por lo que hizo.
El miércoles último, se desarrolló la segunda audiencia del juicio contra Arce, por el delito de homicidio simple, en un hecho ocurrido en 2017. Según se pudo conocer, el crimen fue durante una pelea dado que el imputado acusó a la víctima de robarle el celular a su padre. Acto seguido, lo apuñaló con un cuchillo tipo carnicero en la zona intercostal.
Asimismo, el Tribunal de la Cámara Tercera en lo Criminal y Correccional, de la Primera Circunscripción Judicial, integrado por los jueces Jorge Chamia, Pablo Peralta Martínez y Alberto Miranda, escucharon en esta segunda audiencia a los testigos. En este sentido, declararon Gisela Agüero Hemmes (bioquímica de la policía técnica judicial), Rodrigo Andrés Farias (cabo primero), Silvera Adriana Fernández (pareja del imputado) y Máximo Adán Arce (padre del imputado).
En primera instancia, declaró la bioquímica, quien manifestó que en la vivienda de la víctima se secuestraron cuchillos, una sábana y una toalla con sangre porque posiblemente Cáceres las usó para hacer presión en la herida. A su vez, destacó que en la cocina y una habitación había manchas de sangre.
La profesional destacó que ninguno de los cuchillos secuestrados tenía manchas de sangre, según el estudio bioquímico realizado a los mismos. Además, que las muestras de sangre tomadas al imputado Arce Ponce dieron como resultado que tenía 1,3 gramos de alcohol en sangre y que en la muestra de orina se detectó cocaína.
Pareja de Arce
Una de las testigos más importantes de esta nueva audiencia fue Adriana Fernández, actual pareja del imputado, quien señaló que Arce y Molina Nieto (amigo) habían estado bebiendo alcohol desde la noche anterior. La misma le recordó a Germán que había prometido comprarle unas zapatillas a su hijo por el día del niño, reclamo que le hizo el día del hecho cuando se levanta y lo ve bebiendo junto a Molina Nieto. Con esta excusa, el imputado y su amigo se fueron en su motocicleta a buscar dicho calzado, y regresó media hora después con un hematoma a la altura de la ceja. Al preguntarle qué pasó, le dijo que peleó con Cáceres por el robo del celular a su padre. A su vez, Fernández indicó que Molina Nieto le confesó haber visto que Federico resultó con un raspón de esa pelea, provocada con un cuchillo.
Con respecto a su vida personal, la testigo declaró que hace 10 años está en pareja con Arce Ponce y sabía de su adicción a las drogas, pero que había dejado de hacerlo con frecuencia y que solo consumía cuando se juntaba con sus amistades.
“Era amigo de Germán de toda la vida y antes del hecho no tuvieron problemas”, señaló Fernández, finalizando su testimonial muy emocionada: “Germán está mal por lo que ocurrió con Federico, siente culpa. También porque me ve sufrir a mí y a su hijo. Me dijo que si tiene que pagar por lo que hizo, lo hará”.
Padre del acusado
Como último testigo, declaró el padre del imputado, Máximo Adán Arce. El mismo relató que tenía que cambiar unos caños en su vivienda, por lo que le pidió a Federico Cáceres que lo ayude, ya que sabía que él no tenía trabajo. En un momento, fue a dejarle comida a su hija y, al regresar, Cáceres no estaba y su celular había desaparecido.
Ante esto, el testigo sostuvo que es la segunda vez que Federico le robaba un teléfono, pero que nunca hizo la denuncia porque sabía que tenia adicción a las drogas, al alcohol y no trabajaba, por lo que no le iba a poder pagar un celular. Continuando con su relato, el padre del acusado asegura que su hijo no utilizó el cuchillo que estaba sobre su mesa luego del almuerzo, dado que recuerda guardar los utensilios y el cuchillo en cuestión estaba allí.
Finalmente, resaltó que tenía buena relación tanto con Federico como con su hermano Marcelo Exequiel Cáceres, y que su hijo Germán no le dijo lo que iba a hacer a la casa de Federico, ya que hacía 10 días que no lo veía.