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21/09/20

Enfermera reveló que pacientes compran sillones porque ya no tienen camas

Una trabajadora del Hospital de Orán, Salta, expuso la desesperante situación que atraviesan ante el brote de COVID-19. La denuncia por la falta de insumos.



El Hospital San Vicente de Paul, de la localidad salteña de Orán, está viviendo una situación límite: no tienen camas, respiradores, insumos ni médicos suficientes para atender la demanda de pacientes, que se incrementó tras un brote de coronavirus en la región.

Ramona Riquelme, enfermera de terapia intensiva y de emergencias, y dirigente adjunta de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), reveló la desesperante realidad que deben sobrellevar cada día. “El supermercado de enfrente del hospital se está haciendo rico porque la gente compra los sillones para que los pacientes puedan estar en postura semisentados, ya que nosotros no tenemos camas”, admitió la empleada del centro de salud en diálogo con un medio radial.

La enfermera aseguró que “cada día es peor”. Y denunció: “Nos sentimos defraudados de parte del gobierno del señor (Gustavo) Sáenz. El Presidente ha mandado un avión Hércules, pero nosotros no tenemos aeropuerto para que aterrice y deposite lo que lamentablemente era para nosotros”.

Respecto a esto, la integrante del equipo de salud del hospital aseguró que hay un video en el que se escucha decir al mandatario de la provincia del Norte argentino que no envíe los respiradores a Orán. “Nosotros estamos desesperados por los respiradores”, subrayó Riquelme.

La enfermera contó también que enviaron médicos de Buenos Aires, pero que no son suficientes para cubrir la necesidad de una ciudad de 120.000 habitantes. “No tenemos camas, estamos colapsados. No estamos al límite como dicen, estamos colapsados”, remarcó.

Para ilustrar la magnitud de la tragedia que viven, Riquelme contó que “en menos de 48 horas el coronavirus se llevó a tres personas de una misma familia”, una de ellas era un enfermero del hospital. “Hay 200 muertos”, advirtió, aunque aseguró que serían más porque no se están contabilizando los que mueren fuera del hospital, sin haber sido testeados.

“La cámara de refrigeración de la morgue del hospital no soporta más que dos cuerpos y no tiene la temperatura óptima como para mantenerlos”, señalo también la especialista y reconoció: “Acá se entierran tres cajones en una fosa”. Además, explicó que aquellos que tienen una obra social, y pueden acceder al servicio para cremar el cuerpo, deben realizar 270 kilómetros para poder hacerlo.

“Un paciente de COVID cuando entra a terapia intensiva nunca más tiene contacto con su familia”, explicó Riquelme.

La enfermera reveló que, al momento, “la terapia está toda ocupada” y que los 10 respiradores con los que cuentan están en uso. “A Orán no llegó nada de lo que envió el Presidente”, denunció.

Y agregó: “El país se olvidó de que nosotros necesitamos ayuda. El hospital tiene 40 años de servicio y nunca se compró material quirúrgico. No tenemos nada”.

La enfermera explicó que “el aire no se pagaba, pero ahora se paga porque el paciente trae el oxígeno de su casa” y reveló que en el centro de salud “hay dos manómetros donde se ponen dos vías" para abastecer a dos pacientes con un solo tubo.

Además de la falta de insumos, la empleada del hospital manifestó las pésimas condiciones laborales que tienen. “Una enfermera que es monotibutista gana 13 mil pesos por mes, y una de planta gana entre 25 y 35 mil pesos”, detalló y contó que en terapia intensiva había un equipo de ocho enfermeros pero que solo quedaron cuatro porque el resto contrajo COVID-19.

Riquelme explicó que el personal está saturado, que un estudio para medir la oxigenación en sangre, que antes se hacía 40 veces al mes, hoy se hace 800. “No tenemos camas, no tenemos oxígeno, somos olvidados”, resaltó.

En relación a los médicos enviados por Nación, contó que hay dos trabajando en el hospital. “El resto está haciendo censo. Qué quieren censar”, cuestionó.

Según contó la trabajadora sanitaria, el hospital de campaña “fue preparado por los trabajadores, con las donaciones que el pueblo hizo”.

El Hospital San Vicente de Paul, de Orán, depende del Ministerio de Salud de Salta, es un centro de salud zonal, que atiende pacientes de todo el chaco salteño, incluidas las localidades de Tartagal, Yacuiba, Embarcación, Tuchanal, entre otras. Riquelme subrayó que no tienen antibióticos y que están tratando a los pacientes “con aspirina, para que no hagan una embolia trombopulmonar”.

A su vez, pidió ayuda “a Buenos Aires” para conseguir ambos blancos que puedan dejar en lavandina, con el fin de no tener que trasladarse con ellos hasta sus casas, pudiendo llevar el virus.

“El Presidente se tiene que enterar que no han llegado las donaciones”, resaltó. Y advirtió: “Lamentablemente el Norte le dio el voto, porque nosotros somos peronistas. Pero hoy no somos nada, somos una lacra para el Gobierno”.

Riquelme aseguró que le gustaría sentarse a dialogar con el Presidente, y que le diría: “Cuando necesitás un voto venís por nosotros con un bolso de comida, ahora nosotros necesitamos la vida”.

 

 

Fuente: TN