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26/05/22

Una remera, centro de una polémica en el Senado de Uruguay

Una legisladora del Frente Amplio utilizó una vestimenta en el recinto que respaldaba la Marcha del Silencio de este viernes en homenaje a los detenidos-desaparecidos de la última dictadura y provocó reacciones en el oficialismo.



El Senado de Uruguay atravesó una discusión sin relación con los temas que debatía, sino generada por la remera que usó una legisladora del opositor Frente Amplio cuando le tocó presidir la sesión, vestimenta que respaldaba la Marcha del Silencio de este viernes en homenaje a los detenidos-desaparecidos de la última dictadura.

“Todos somos familiares”, decía en letras blancas la remera de la senadora Amanda Della Ventura, que ayer debió presidir el debate cuando se retiró la titular del cuerpo, la vicepresidenta Beatriz Argimón.

“Todos somos familiares” es la consigna con la que los organismos de derechos humanos llaman a marchar este viernes en Montevideo, con la idea de que todos los asistentes, y no únicamente sus familiares, levanten las fotos de las víctimas del terrorismo de Estado.

 

El senador nacionalista Gustavo Penadés pidió dejar constancia política de su reparo a la vestimenta de Della Ventura: “Usted tiene todo el derecho de ingresar a sala con la remera que le parezca; nunca hemos puesto condición en ese sentido. Pero en el momento que pasa a presidir el Senado nos está representando a todos. La bancada del Partido Nacional quiere dejar constancia que usted, de esta manera, no nos está representando a todos utilizando esa remera”, expresó.

La frenteamplista Liliam Kechichian le pidió entonces a Penadés que precisara si existe un artículo en el reglamento de la Cámara que expresamente prohibiera a Della Ventura usar esa remera, porque en ese caso la oposición estaba dispuesta a pedir un cuarto intermedio para analizarlo.

“Con mucho gusto voy a buscar la consideración que determina que desde la presidencia del Senado se está imposibilitado de hacer cualquier tipo de aclaración o expresión que no represente a todo el Senado como tal, violentando la imparcialidad que el presidente tiene que tener a la hora de dirigir las sesiones, y eso sí que está establecido en el reglamento”, retrucó Penadés.

 

Y también hizo su crítica Graciela Bianchi, que varias veces tuvo cruces con Della Ventura: “Otra vez lo mismo. Yo no tengo ningún problema de repetir las cosas cuando estoy segura de que me asiste la verdad: el presidente del Senado representa a todos”.

Las dos legisladoras ya habían discutido hace meses, cuando Della Ventura usó un barbijo con la leyenda “Sí”, en los días previos al referendo que puso en debate varios artículos de la Ley de Urgente Consideración (LUC) que defendía el oficialismo.

Tras algunas otras opiniones, Della Ventura explicó que no sabía que iba a tener que asumir la presidencia de la Cámara y que, aún así, estaba “plenamente convencida” de que su imparcialidad “no cambia por la vestimenta con la que esté”, reportaron diarios montevideanos.

El nacionalista Penades no pareció quedar conforme, y después del cruce señaló que “el tema no está relacionado con el fondo de la cuestión, que uno puede llegar a compartir o no, sino con la necesaria imparcialidad que se debe tener desde la presidencia del Senado para conducir el debate”.

Familiares de Detenidos-Desaparecidos hacen este viernes, después de dos años de virtualidad, otra Marcha del Silencio por el centro de Montevideo, en la que esperan exhibir 20.000 fotos de víctimas del terrorismo de Estado, y pidieron a todos los asistentes que las exhiban.

La de mañana será la primera oportunidad en la que se manifieste “Historias desobedientes”, el colectivo que agrupa a hijos e hijas de represores, idéntico al que ya existe en Argentina y Chile.