El PJ riojano se movilizó en la mañana de este miércoles en apoyo a Cristina Fernández de Kirchner en el Parque de las Juventudes. A las 14, se espera una gran movilización en Plaza de Mayo con la presencia confirmada del gobernador Ricardo Quintela.

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En el marco de una gran movilización nacional, La Rioja se sumó este miércoles a una jornada de lucha en defensa de la democracia y en apoyo a Cristina Fernández de Kirchner, tras la confirmación del fallo en la causa Vialidad por parte de la Corte Suprema.

La cita en la Capital fue a las 10:00 en el Parque de las Juventudes, al pie del monumento a Facundo Quiroga, donde se realizó la concentración con lectura de un documento de repudio a la condena judicial que, según los convocantes, busca proscribir a una de las principales referentes del campo nacional y popular. La consigna que unifica la convocatoria es clara: "Si van contra la democracia, van contra vos".

La convocatoria reunió a sectores políticos, sociales, gremiales y estudiantiles, que confluyen con consignas como “Cristina no está sola” y “La patria no se proscribe”. Las calles de la Capital riojana son escenario de diversas columnas que avanzan hacia el parque, mientras crece la cantidad de manifestantes.

La actividad forma parte de una movilización federal, que tiene su epicentro en Comodoro Py, donde se espera una masiva marcha bajo la consigna: "Argentina con Cristina. Vienen por ella, vamos con ella." La movilización fue convocada por múltiples sectores políticos, sindicales y sociales, y partirá desde la casa de la expresidenta, ubicada en San José y Humberto Primo, en el barrio porteño de Constitución, donde se mantiene una vigilia permanente desde que la Corte Suprema confirmó la condena.

La convocatoria en todo el país apunta a defender la democracia, la participación política y la voluntad popular frente a lo que se considera una ofensiva judicial con fines políticos.

 

Lectura de documento: La historia y la Patria nos convocan

No es una cuestión personal.

Cristina Fernández de Kirchner encarna y representa la Patria, la democracia y a gran parte del pueblo argentino, agredido y perseguido por una derecha cruel que pretende destruir la historia de un pueblo que se ha fogueado en la lucha por la justicia social, la verdadera libertad, la independencia, la soberanía y la democracia.

Como los coroneles de Mitre en el siglo XIX, vienen en pleno siglo XXI por los/as referentes y dirigentes populares, para someter la Patria al poder oligárquico, antipopular y antinacional.

No lo hacen a punta de fusiles y mercenarios pagados para matar, como en aquellos tiempos de caudillos y montoneras masacrados por sanguinarios coroneles del puerto y la antipatria; ahora lo hacen con el poder de los medios hegemónicos que controlan y una Justicia subordinada a los intereses de los poderes económicos y financieros.

Con estas armas descalifican, estigmatizan, acusan y procesan de forma amañada, sin ajustarse a la Constitución ni a las normas del Estado de Derecho, dictando fallos ordenados desde los centros del poder mafioso del anarco-capitalismo, cínico y odiador, que necesita castigar, disciplinar y anular a dirigentes como Cristina, como nuestro gobernador Ricardo Quintela, que “con un oído en el pueblo”, no negocian la dignidad de las mayorías, el trabajo, la salud, la educación y el bienestar de la sociedad.

Por eso, en su incesante e irrefrenable ambición, no les interesa derrumbar las bases de la civilización democrática, ni la república, y arremeten con todo.

La motosierra, ese símbolo nefasto, destruye y hace trizas la Patria desde sus cimientos y sus entrañas.

Como los Coroneles de Mitre, vienen por las provincias, anteriores y forjadoras de la Nación, quitándoles sus recursos legítimos, robándoles su presente y su porvenir, expoliando sus bienes comunes y recetando, como remedio, la agonía y la muerte de su población, a través del despido masivo de miles de empleados públicos, como lo anuncian los aprendices y discípulos de Milei y de Macri, como Martín Menem y sus lugartenientes locales.

Ellos son los que alimentan una matriz mafiosa en la Justicia Argentina, que proscribe y cancela a toda representación opositora de los intereses populares.

A Cristina y Quintela los odian porque no se doblegan y mantienen en alto las banderas humanistas y sociales de los grandes movimientos populares como el peronismo.

Ellos odian al peronismo, odian a Perón y Evita, les molestan, les incomodan para sus planes de despojo y entrega.

No perdonan que el peronismo incluya, predique y realice el amor y la igualdad.

Sin embargo, no podrán.

A pesar de los fusilamientos —ahora mediáticos y judiciales— no podrán acallar ni vencer al pueblo que abraza la vida y la esperanza junto a sus dirigentes, que saben representarlos coherente y dignamente, como Cristina Fernández de Kirchner y Ricardo Quintela.

Es que a ellos no los moviliza el odio ni el rencor, sino el amor y las convicciones.

Por eso, las prisiones y las cárceles, las persecuciones políticas, lejos de amedrentar y desmoralizar, refuerzan la voluntad indestructible y porfiada de construir una Nación grande con un pueblo feliz.

Con Cristina, que tanto hizo por el pueblo argentino; con Quintela, abanderado del federalismo que aún falta conquistar plenamente; unidos, organizados, con la pasión invencible del amor y la Justicia Social, resistimos los embates del odio y a la vez construimos —con creatividad, arraigados en nuestra gloriosa historia— la esperanza y el futuro de una Patria de hermanos y hermanas, justa, libre y soberana, como nos enseñaron Perón y Evita.

Cristina, desde su injusta prisión y proscripción; como Evita desde su rebeldía apasionada por la igualdad y la dignidad humana, nos interpelan a vencer miedos y tibiezas y, recogiendo junto a nuestro gobernador Quintela sus nombres, reconstruir la esperanza y la alegría.

Aquí estamos. No nos han vencido.

Con Cristina, somos la Patria.

Con Quintela, somos La Rioja.

Hasta la victoria.

Hasta que seamos lo que soñamos.

¡Viva la Patria!

¡Viva Perón y Evita!

¡Viva Néstor y Cristina!

¡Viva Ricardo Quintela!

¡Viva La Rioja!

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