
Así lo expresó el Juez Federal, Dr. Daniel Herrera Piedrabuena, al referirse sobre el narcotráfico. Destacó el trabajo que realizan las fuerzas de seguridad en distintos allanamientos con resultado positivo y expresó que "la droga es un flagelo, se secuestra, pero el problema no se termina, sigue". Apuntó a la importancia del trabajo en prevención para que la población tome "conciencia del daño que produce el consumo de drogas".
A partir del trabajo que se está realizando activamente en la provincia, a través de distintos allanamientos donde, en muchos de ellos, se lograron resultados positivos con el secuestro de drogas y estupefacientes.
Ante ello, el juez Piedrabuena indicó que “en reiteradas oportunidades he venido diciendo que realmente esta es una tarea de todos los días, es una tarea, sobre todo, de la prevención en cuanto, en base a las distintas investigaciones o líneas que se trazan investigativas, se logra ir desarticulando pequeñas bandas ubicadas ya sea tanto en Capital, en Chilecito y la zona sur de nuestra provincia”, destacó.
Añadió que dicho trabajo “lleva a una gran tarea, por parte de la brigada de provincia, como de la Policía Federal, y también participa Gendarmería Nacional”, subrayó.
Afirmó que “la droga es un flagelo, porque no es que hacemos allanamientos, se secuestra y se termina el problema, no. El problema sigue. Y en eso está lo que es la parte de la prevención en base a las investigaciones. Y también vuelvo a reiterar la colaboración que hace la comunidad en cuanto a toma conciencia del daño que produce el consumo de la droga”.
“Hoy la droga está, en sus diferentes tipos, penada en nuestra ley 23.730. Habrá cuestiones que a futuro los legisladores tendrán que tratar, sobre todo lo que hace a consumo personal, pero hoy todavía no está legislado eso. Solamente tenemos un fallo de la Corte, en el caso Arriola, donde se protege, de cierta manera, pero bajo un ámbito de privacidad, el consumo de marihuana”.
“Surge de una jurisprudencia de la Corte. Pero falta todavía, que se trate este tema en cuanto por parte de nuestros legisladores. Yo creo que las políticas públicas son las que tienen que tratar de encauzar esto, de poder llegar a la ciudadanía, de poder entender, de comprender, también a través de la educación, de la escuela, de las organizaciones civiles nuestras en nuestra provincia, del daño que produce el consumo de estupefacientes y, en otros casos, también de drogas sintéticas.
Consultado sobre si la legalización del consumo sería una salida a la problemática, dijo “yo creo que es tomar conciencia de situaciones por las cuales estamos atravesando, yo pienso que ese es un gran debate que tendrán que dar nuestros legisladores, que son los representantes de la sociedad”, resaltó.
Consultado sobre si existe presencia de figuras vinculadas al narcotráfico en la provincia manifestó que “no, nosotros no podemos hablar de narcotráfico a niveles como Rosario, Buenos Aires, Córdoba. Acá lo que tenemos es un gran narcomenudeo, principalmente, que facilita estas situaciones. Y si existe eso es porque hay gente que lo consume. Y hay gente que paga y permite que estas pequeñas bandas tiren de nexo y de facilitación de pacientes”.
Por eso “yo hago siempre un llamado a las familias, a nuestras familias, que realmente son el soporte en cada casa de sus hijos, de todos los entornos afectivos que tienen para poder enfrentar esto. Y esto no es un chiste, no se debe tomar con sorna muchas veces las investigaciones que se hacen, los comentarios falaces que hacen muchas veces a las fuerzas preventoras. Acá se trata de apoyar, acá se trata de que todos juntos se encare el tema este del no consumo en forma masiva, porque a la larga va a dañar, y ya daña a gran parte de nuestra juventud y a otras personas adultas también”.
Por último, dijo “tenemos que ser conscientes de que tampoco tenemos los medios sanitarios, como para poder atender a un gran número de personas adictas. Tampoco tenemos, económicamente para sostener los costos que eso significa. Entonces se trata de que tenemos que concientizarnos, que tenemos que empezar desde la escuela, los docentes, la familia y todo aquello que hace a la convivencia de nuestra sociedad, a las organizaciones sociales, de poder transmitir el daño que produce el consumo de este tipo de pacientes”.