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14/11/22

"Una Vida Brillante del Dolor más Grande"

¡Bendiciones amigo! Permítame compartir una Palabra de Dios (2 Crónicas 4: 9 y 10).



Por José Luis Caseres

 

"Y Jabes fue más ilustre que sus hermanos, al cual su madre llamó Jabes que  significa: "Dolor" diciendo: por cuanto lo di a luz con dolor. Y Jabes oró a Dios  y dijo: ¡Cómo quisiera que me des tu bendición, que ensancharas mi territorio y  tu mano  esté conmigo y  me libres  del mal para que no sufra yo ningún daño! Y Dios le concedió lo que pidió.

Qué bendición es saber que aún del dolor podemos levantarnos para ser  ilustres tocar el corazón de Dios y recibir la respuesta que estamos pidiendo.

Era una mamá embarazada, cuando llegó la hora de dar a luz a su bebé, se complicó todo, había contracciones pero no eran suficientes.

Las horas pasan el dolor aumenta, no es para menos, se calcula que los dolores del parto equivalen a la fractura de 20 huesos a la vez.

¿Se imagina el dolor y el sufrimiento de esta mamá?

Al caer la tarde de ese día eterno, en el final de las fuerzas, cuando ya parecía todo perdido, al fin nació el bebé.

Mamá lo abraza fuerte, y entre lágrimas y amores maternos, dice: Se llamará Jabes, "porque lo traje a la vida con mucho dolor"

 Me encanta la Palabra de Dios, porque tiene la virtud sobrenatural de transformar algo muy doloroso en una bella realidad.

Esta mamá hizo de su hijo, de su dolor,  un hombre brillante consagrado a Dios lleno de amor lleno de Fe, una fuente  de inspiración, para mí, para usted,  para todos.

Miraba a su bebé y pensaba, traje una vida del dolor, saqué algo bello de mis lágrimas, no me rendí, fue largo el proceso pero valió la pena.

Amado: ¿pensó alguna vez, que de sus peores experiencias, sus lágrimas y su dolor por lo que pasó, o está viviendo, puede salir algo brillante?

La vida está llena de personas que sufren, hay dolor por donde mire, hay fracasos, muertes, pérdidas, corazones rotos vidas desesperadas, resignadas en el dolor, sólo les quedan heridas, resentimiento, señalando culpables, así viven.

No saben que aún del dolor puede nacer la vida más hermosa.

Tengo una buena noticia para usted, en Jesucristo, todos podemos transformar el dolor y el sufrimiento, en vidas ilustres, sobresalientes, virtuosas. Que caminen con Dios, que  aprendan  a tocar el corazón de Dios.

Cuando oran, como Jabes, el Padre escucha y al momento envía la respuesta.

Le da placer responder. Porque ellos nacieron del dolor, vienen de los dominios de la muerte, del fracaso, pero con Dios transformaron  su fracaso en otra oportunidad, su incredulidad en Fe Poderosa, su nada en abundancia, su dolor en plenitud  de alegría, su esclavitud en libertad, su desesperación en paz.

Amado, su más grande dolor, puede transformarlo en la más bella vida, con Dios, siempre con Dios, Oremos.