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Lule, provincia de Tucumán

En la entrevista que le realizaron hace tiempo a Diego Spagnuolo, le iban tirando en forma de clave quienes podían estar pasándole la motosierra. Lo había entrevistado el estudiante de filosofía, ex relator deportivo y accionista de una radio de streaming. De allí sale la frase ‘Lule, Tucumán’. Cuando se vuelve a repetir esas imágenes, se entiende lo que hablaban en clave.



Por Carlos Liendro

Como siempre esta clase de periodistas, saben más de lo que cuentan y ya nos tienen acostumbrados a armar operaciones mediáticas en favor de alguien. Esta vez le advertían lo que podían hacerle.

A las pocas semanas se pudo escuchar por radio y tv, las grabaciones con la voz de Spagnuolo, que comenzó a pasar la cadena de Radio10 y C5N. Los periodistas que en el programa ‘Argenzuela’ fueron los primeros en reproducir esas grabaciones, comentaron después, que todos recibieron esas ‘escuchas’. Solo ellos se anticiparon a pasarlas, luego de chequear la información. A la semana siguiente no se podía tapar él sol con las manos’, ya todos los canales y radios reproducían la voz del ex director de ANDIS (ya que había sido eyectado de ese cargo, a unos días de tener una reunión en la Casa Rosada), y se sentían indignados por esta forma de corrupción.

Nadie comenta cómo se consiguieron esas grabaciones, donde Spagnuolo, comienza a comentar como es el engranaje de ‘los peajes’, ‘las coimas’ con las que se quedaban. Pero en algunas de esas grabaciones van saliendo nombres. Nombres que para muchos eran conocidos. Lo que hay que seguir explicando es la mecánica. El impacto fue fuerte. Mientras la gente y especialmente aquellos que les dieron de baja en sus pensiones por discapacidad, ya no podían solamente indignarse, al conocer los montos con los que se hacían negocios en determinada droguería, que tiene contratos con el Estado. Se habla de 65 mil personas que han sido dadas de baja, en condiciones humillantes. No les había llegado la comunicación, y se encontraban en que no tenía nada cuando iban a los cajeros a retirar su pensión del mes. Nunca se vio esto en la Argentina.

Lilita Carrió no anduvo con vueltas, cuando la volvieron a hacer visibles los holdings. Ella ya había dicho quien era ‘la cajera’, y como recaudaban para la campaña del presidente. Solo que esta vez en su voz de Casandra, fue directamente a los hijos y sobrinos de Eduardo Menem y de cómo seguían haciendo negocios en el Estado. Del período de Carlos Menem decía que nunca habló con su hermano y que este como senador, ya tenía de secretario a ‘Lule’. Luego llegó Martin actual presidente de la cámara de diputados, y uno que se empieza a conocer Sharif. Todos llegaron por el peronismo, desde su provincia natal. Dos cuestiones se comenzaron a saber. De los negocios en el Estado- que vienen de épocas anteriores a Macri y luego va renovando-, están las que tienen de seguridad y de limpieza (empresas) y las ‘Tiny houses’. Las declaraciones juradas de Martín Menem pueden corroborase, en el aumento de su patrimonio.

Ambos Menem, fueron y son aún el sostén político de los armados en el interior de gobernadores y legisladores. La elección en la provincia de Corrientes es una muestra. Las escuchas salieron en medio de estas elecciones, la de Corrientes y la Provincia de Buenos Aires. Cuando tuvo que salir a dar la cara (algunos medios dicen que fue obligado por los hermanos Milei) desmintió las grabaciones y menos aún que Karina fuera la recaudadora. Ponía las manos en el fuego.

En la Casa Rosada, hay un fuerte aire de paranoia. Se siguen preguntando quién filtró lo que todo el país escuchó. Todos desconfían de todos. Por eso en todos lados y hasta los mismos votantes del presidente hacen bromas con el 3%. Memes, canciones, marchas en el conourbano (con la huida en moto, del que pide bala) ilustran estos tiempos. Jorge Semprún, fue un escritor español, (que estuvo detenido en Buchelwald durante la “2da Guerra), tenía una visión pesimista durante ‘la guerra fría’ sobre la política. Decía que en el futuro no serán los políticos quienes hagan lo que pueblo necesita. Será una guerra de espías- en nuestro país de ‘servicios’- quienes tiene el poder de grabar, filmar, seguir a esos funcionarios/ políticos, para luego torcer y mostrar la otra cara de esa clase dirigente, según la conveniencia de los que les paguen.