
A través de su abogada, presentaron ante la Justicia un pedido formal para profundizar peritajes post mortem y reclamar la incorporación de pruebas fundamentales aún no agregadas al expediente.
La causa que investiga la muerte de María Inés “Nene” Quintero sumó en las últimas horas un nuevo capítulo. La abogada de la familia, Ruth Borda, presentó ante el Juzgado de Instrucción un extenso escrito en el que se solicita la realización de múltiples pericias post mortem y la incorporación de actuaciones sumariales aún no agregadas a la causa. El objetivo: obtener certezas científicas sobre cómo y cuándo falleció la joven, y si hubo o no intervención de terceros.
El documento, de más de treinta puntos técnicos, pide que se analice con detalle la cuerda hallada junto al cuerpo, evaluando si su rotura fue accidental o provocada. Se solicita además el estudio del nudo utilizado, la resistencia del material, el estado del punto de anclaje, y la posibilidad de que haya habido manipulación o montaje de la escena.
También se pide un informe riguroso sobre la postura del cuerpo al momento del hallazgo, la presencia de lesiones traumáticas, la compatibilidad de las livideces con la posición final, y un análisis completo de la ropa, incluyendo signos de arrastre, impacto o transferencia de materiales ajenos.
Uno de los puntos más sensibles del pedido apunta a revisar la estimación oficial de la data de muerte, que ubica el fallecimiento aproximadamente 19 días antes del hallazgo. La querella solicita que el médico forense detalle con qué parámetros y fórmulas se llegó a esa conclusión, y si se utilizaron métodos complementarios como análisis entomológico (presencia de insectos cadavéricos), temperatura corporal, rigidez cadavérica o bioquímica del humor vítreo.
El escrito también cuestiona si el grado de descomposición observado es realmente compatible con ese período, considerando la temperatura, humedad y condiciones del lugar del hallazgo. En caso de no haberse realizado ciertos estudios, se solicita que se justifique su omisión de manera técnica y fundada.
Por otro lado, la abogada Borda pidió la incorporación urgente y cronológica de una serie de pruebas y testimonios que aún no fueron agregados al expediente. Entre ellos: declaraciones de familiares, el registro de llamadas aportado por la hermana de la víctima, actuaciones con perros de búsqueda, entrevistas con personas que encontraron el cuerpo, y el testimonio del último vendedor con quien María Inés habría tenido contacto. “La familia no busca entorpecer la investigación, sino asegurarse de que todas las medidas técnicas sean agotadas con rigor. Quieren la verdad, no suposiciones”, señaló una fuente cercana a la querella.
El pedido fue ingresado formalmente en las últimas horas y se encuentra ahora bajo análisis de la jueza interviniente. La familia de María Inés Quintero espera que la Justicia avance con la máxima responsabilidad en el tratamiento de estas pruebas, fundamentales para esclarecer los hechos.