
En Arabia Saudita fueron ejecutadas a 17 personas en tres días, lo que supone el ritmo más rápido de pena de muerte desde 2022 y eleva el número total de 2025 a 239.
En Arabia Saudita fueron ejecutadas a 17 personas en tres días, lo que supone el ritmo más rápido de pena de muerte desde 2022 y eleva el número total de 2025 a 239. El aumento despertó preocupación en los grupos defensores de los Derechos Humanos.
El primer día hábil de esta semana fueron ejecutadas dos personas, por lo que el número total llegó a 17 en tres días, según informaron los medios estatales.
Dos saudíes fueron ejecutados por “delitos terroristas”, según informó la agencia oficial de noticias del reino, después de que el sábado y el domingo fueran ejecutadas 15 personas, en su mayoría extranjeros, por delitos relacionados con las drogas.
Trece de los ejecutados el sábado y el domingo fueron condenados por contrabando de hachís, y otro por contrabando de cocaína.
A este ritmo, Arabia Saudita está en camino de superar las 338 ejecuciones del año pasado, la cifra más alta desde que se empezaron a registrar los casos a principios de la década de 1990.
Según un recuento de datos oficiales realizado por la AFP, las ejecuciones de este año incluyen 161 por delitos relacionados con las drogas y 136 de los casos involucraron a extranjeros.
Los analistas relacionan este aumento con la “guerra contra las drogas” iniciada por el reino en 2023, ya que muchos de los primeros detenidos están siendo ejecutados tras los procedimientos legales. La nación árabe reanudó las ejecuciones por delitos relacionados con las drogas a finales de 2022, tras suspender esa práctica durante unos tres años.
Afirma que solo ejecuta las penas de muerte después de que los acusados hayan agotado todas las vías de apelación, y que las ejecuciones tienen como objetivo garantizar la seguridad y desalentar el consumo de drogas.
Los activistas afirman que el mantenimiento de la pena capital socava la imagen de una sociedad más acogedora, que es fundamental para la agenda de reformas Visión 2030 del príncipe heredero Mohammed bin Salman.