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31/03/20

Educar en tiempos de Pandemia

En estas circunstancias donde se intenta prevenir con el aislamiento el avance del Coronavirus, es necesario utilizar herramientas metodológicas y estrategias para educar primero sobre las características propias del virus, prevención y acción ante la infección del COVID-19. Para después poder encarar otros contenidos de la currícula escolar.



Prof. Mag. Margott Flores

Es necesario también aprender un poco del manejo de las emociones como el miedo, la ansiedad, el estrés, la irritabilidad, la desconexión, la solidaridad,  etc., y  sortearlos de la mejor manera en el logro del aprendizaje.

Los celulares, las Tablet y los ordenadores ocupan un lugar importante dentro del proceso de enseñanza aprendizaje.

En este caso el aprendizaje está centrado en el alumno con la interacción de la tecnología. El docente guía a través del diseño de tareas significativas y la selección de herramientas a emplear.

El uso de las variadas aplicaciones de los  dispositivos móviles contribuye así al desarrollo de la autonomía estudiantil, un objetivo que todos buscamos alcanzar de diversas maneras.

 Se promueve también un  aprendizaje colaborativo, que permita intercambiar información, algunos aportes y buenas ideas.

 Se pueden elaborar documentos, completar formularios, diagramar un proyecto áulico, y porque no,  un proyecto que trascienda los muros escolares y tengan beneficios  para la comunidad.

Si aprovechamos que nuestros alumnos utilizan el celular en todo momento, podremos aprovechar esa motivación incorporándolas a nuestras clases.

En estos días de encierro, el docente puede dar una video conferencia a sus alumnos sobre un tema determinado,  estableciendo una guía para contestar, o  el estudiante dar su punto de vista  sobre el tema y grabarlo con su teléfono móvil.  Luego lo envía al docente por whats App o por correo electrónico. De esa forma perderán también el miedo a hablar en público. Es un buen recurso.

Pueden hacerlo también sobre un libro o un experimento científico.

También realizar actividades de geolocalización o realidad aumentada que enriquecen el entorno físico con información extra.

 Aprovechando el potencial comunicativo de las redes sociales se organizan grupos de trabajo con un fin pedagógico, para incursionar en literatura, o historia de las civilizaciones.

El uso de internet, permite al estudiante ingresar en grandes bancos de información, basta solo que el educador los guie en  los sitios confiables.

A los niños y adolescentes, les gusta buscar información en la red.

“El sentido lúdico que tiene para ellos esta búsqueda, acompañado del hecho de dedicar tiempo a la lectura de los datos o textos recopilados, hace aumentar las puntuaciones de los niños en pruebas de comprensión lectora, lo que repercute positivamente en su rendimiento académico” Shaffer y Kipp, 2010 .

Lewin destacó “que este momento de aislamiento es también una oportunidad para potenciar la autonomía. Brindarles a los niños y jóvenes autonomía significa que ellos podrán desarrollar la capacidad que les permita gestionar y regular sus propios aprendizajes”

Trae aparejado también la ventaja que en todo momento tienen las consignas de los trabajos y pueden responder en el momento que lo decidan. Esto les da autonomía. Lo que se pretende de nuestros alumnos en formación es lograr que sean personas críticas, autos determinados y autónomos.

Es cuestión de decidirse a  usar los medios tecnológicos para enseñar y aprender

El rol del docente es fundamentar también en tiempos actuales, comprender la importancia de su uso, facilitará una mejor comprensión, usando las redes sociales como medio innovador en nuevos entornos de aprendizaje