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04/06/20

El ministro de Salud fue dado de alta: Análisis

Ginés Gonzalez García (74 años) es el actual ministro de Salud de la Nación. Y es una suerte de "coordinador" de la pandemia de COVID-19.



Por Héctor de la Fuente

El médico sanitarista abandonó el viernes último al mediodía (12.39 pm) el elegante sanatorio Otamendi de la Capital Federal, al que ayer arribó por sus propios medios debido a una parestesia (sensación de cosquilleo u hormigueo) distal (alejada) en su miembro superior izquierdo.

Por ello, y para más controles (de paso), y con un chequeo pendiente: quedó internado para una batería de estudios neurológicos, cardiológicos y traumatológicos por 24 horas.

El ministro había sentido un hormigueo en su brazo y debido a ciertos antecedentes traumatológicos acudió a su centro de salud de siempre, que está enclavado en la zona de las clínicas, enfrente de la Facultad de Medicina de la UBA, y del legendario Hospital de Clínicas.

El veredicto de los médicos fue concluyente: Hematoma subdural (bajo la capa meníngea denominada duramadre). Esvun hematoma laminar crónico (larga data) en el cerebro como hallazgo en las imágenes de la más alta resolución. Por ejemplo, tomografías computadas.

También se le hizo un eco doppler vascular de arterias del cuello que miden el flujo arterial y su velocidad como para detectar o descartar una obstrucción en esa estrategia y milimétrica arteria que irriga el cerebro, por ejemplo.

El ministro que está considerado un experto en Salud Pública fue ministro en anteriores gestiones varias (2002-2007 con Duhalde y Kirchner y antes fue ministro provincial con Antonio Cafiero).

La noticia de su internación generó versiones y una lógica preocupación debido a sus antecedentes médicos, su función y por ser una persona en riesgo.

¿Hipertensión? ¿Sobrepeso? ¿Medicación?

¿Stress? ¿Stress político? ¿Antecedentes coronarios? Fueron las preguntas en la calle y en las redacciones.

Sin fiebre y sin síntomas respiratorios en su ministro, el ministerio de Salud emitió un comunicado.

G.G.G., tal por sus siglas, como algunos cariñosamente lo llaman en el justicialismo, consideró que no era necesario someterse a un hisopado para chequear el asunto Coronavirus.

El ministro, un compulsivo al trabajo, comenzó a trabajar como siempre. Aún cuando la recomendación médica y el sentido común le diga reposo.

El presidente Alberto Fernández le espetó su consabida frase "Ginés, a cuidarse. Cuidate".

Se sabe, Gines mismo lo dijo con fina ironía al salir del Otamendi el viernes al mediodía: " Tengo dura la cabeza".

Desde Buenos Aires.