
La autopsia confirmó que la joven madre, hallada sobre un colchón parcialmente incendiado, ya estaba sin vida cuando se inició el fuego. Su pareja sigue internada y bajo custodia policial. La comunidad exige justicia mientras avanza la investigación.
El femicidio de Elba Ibáñez, de 34 años, estremece a la comunidad de Chepes y conmociona a toda la Provincia. Los primeros resultados de la autopsia confirmaron que la mujer murió por asfixia y que su cuerpo presenta signos de golpes y estrangulamiento, lo que indica que fue asesinada antes de que se produjera el incendio en su dormitorio.
El hallazgo tuvo lugar en la mañana del lunes, alrededor de las 9, en una vivienda del barrio El Alto, donde la víctima fue encontrada sin vida sobre su cama. El colchón mostraba quemaduras parciales y un foco ígneo de escasa magnitud, lo que desde el inicio generó sospechas sobre la verdadera causa de muerte.
El director de Investigaciones de la Policía de la Provincia, comisario Marcelo Alanis, confirmó, en una entrevista con Radio La Red, que el cuerpo de la mujer no estaba totalmente quemado y que la escena presentaba elementos que indicaban un posible hecho violento. “Estamos trabajando con el informe del perito en siniestros, la autopsia y la declaración del hijo menor serán claves para esclarecer lo ocurrido”, explicó el director de Investigaciones.
El principal sospechoso es la pareja de Elba, un hombre identificado con el apellido Contreras, quien permanece internado en el hospital local bajo custodia policial y ahora principal sospechoso del hecho. Contreras presenta quemaduras en los pies y una profunda herida en el cuello, que requirió 14 puntos de sutura.
Según trascendidos, se investiga si el hombre atacó a Ibáñez con un arma blanca, la asfixió y luego habría intentado incendiar la habitación para encubrir el crimen, provocándose él mismo las lesiones. Hasta el momento, Contreras no fue formalmente imputado, pero, con los datos obtenidos en la autopsia, su situación judicial es más que complicada, Por el momento, continúa bajo vigilancia mientras se reúnen pruebas concluyentes para definir su situación procesal.
Un niño, testigo clave
En la vivienda también vive el hijo de la pareja, de 12 años, quien se encontraba en la escuela primaria cuando ocurrió la tragedia. Un dato revelador es que ese día el menor no fue llevado por sus padres, sino por un vecino, quien podría aportar detalles fundamentales para la causa. El menor será entrevistado en Cámara Gesell para proteger su integridad y recabar su testimonio sin revictimizarlo.
Conmoción y pedido de justicia
La noticia de la muerte de Elba se propagó rápidamente y generó un profundo impacto entre vecinos, familiares y toda la comunidad de Chepes, que se encuentra consternada y movilizada. Organizaciones de derechos humanos y grupos feministas reclamaron, anoche, en una marcha, que se esclarezca el caso sin dilaciones y exigieron justicia por Elba, quien deja a un hijo menor de edad.
La investigación continúa bajo directivas de la Justicia provincial y la Fiscalía de Instrucción, que aguardan los resultados de las pericias forenses finales, las conclusiones del perito en siniestros y la evolución médica del principal sospechoso para avanzar en su imputación formal.
Mientras tanto, la familia de la víctima exige respuestas y la comunidad se mantiene en alerta para acompañar el proceso judicial.