
Francia prohíbe los cigarrillos en playas, parques y alrededores de los colegios a partir del 1 de julio.
Los cigarrillos en la playa, en los parques o cerca de los colegios serán cosa del pasado: el 1 de julio, el Gobierno francés pondrá en marcha una prohibición prometida para finales de 2023, pero que las asociaciones antitabaco temían que nunca llegara a producirse.
"Allí donde haya niños, el tabaco debe desaparecer. A partir del 1 de julio, las playas, los parques y jardines públicos, los recintos escolares, las marquesinas de autobús y las instalaciones deportivas de toda Francia estarán libres de humo", declaró Catherine Vautrin, ministra francesa de Trabajo, Sanidad, Solidaridad y Familia.
El incumplimiento de la prohibición acarreará multas, resaltando que la libertad de fumar "termina donde empieza el derecho de los niños a respirar aire puro.
La prohibición también se aplicará a los centros de enseñanza secundaria inferior y superior, en particular para evitar que "los alumnos de los centros de enseñanza secundaria inferior y superior fumen fuera de su centro escolar". La prohibición no contempla terrazas de los cafés ni a los cigarrillos electrónicos.
En general, estas prohibiciones y las aplicadas anteriormente (en lugares de trabajo, transportes públicos, escuelas, parques infantiles, zonas de transporte, etc.) son ahora "más o menos respetadas", según Philippe Bergerot, presidente de la Liga francesa contra el cáncer.