
El intendente de Rosario, Pablo Javkin, denunció este lunes que los dueños de los laboratorios HLB Pharma y Ramallo S.A., investigados en la causa del fentanilo contaminado, "tienen vínculos con el narcotráfico" y que se debe determinar si "hubo desvíos al mercado ilegal".
Javkin resaltó que la Justicia comprobó que solamente "dos laboratorios contaban con una habilitación para importar fentanilo": "Aumentó la importación de fentanilo en la época del covid-19, pero después se prolongó".
"Debemos saber si seguramente hubo también desvíos al mercado ilegal y, además, hay vínculos entre los laboratorios y algunos personajes ligados al narcotráfico", consignó sobre "la trama de complicidades".
En este sentido, el jefe comunal sostuvo que los propietarios del laboratorio Apolo -el cual explotó durante la madrugada del 24 de junio de 2016 en el barrio Tablada y dejó el saldo de cinco heridos- "fueron absueltos y como pena fueron a limpiar el museo del PJ en San Nicolás".
Javkin describió que el caso es "muy grave" porque se trata de la adulteración de medicamentos utilizados en pacientes críticos y mencionó que "en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA)" se aplicó el opioide a enfermos que "están internados en terapia intensiva".
"No vamos a tolerar a ningún grupo mafioso actuando en el marco de la ciudad de Rosario", agregó y confirmó que la Municipalidad se presentará como querellante en la investigación.